jueves, 18 de agosto de 2022

Recuerdos de Tharsis....El vídeo comunitario

Recuerdos de Tharsis....El vídeo comunitario.



...A mediados de la década de los ochenta, irrumpía con fuerza en los hogares de Tharsis, una novedad llamada...”El vídeo comunitario” cuyo principal promotor, impulsor y creador, recaía en la persona de Antonio Vázquez (d.e.p).


Gran novedad, supuso la presencia en los hogares del pueblo, de este nuevo ingenio, que tras un módico precio de sus asociados, ofrecía cuatro o cinco películas al día.


Todo comenzó un día cualquiera de la lejana década de los años ochenta, donde Antonio, poseedor del primer videoclub en el pueblo, alquilaba películas del sistema VHS, porque el otro sistema llamado Beta, no obtuvo adeptos, por resultar más complicado de reproducir, fracasando de manera estrepitosa, desapareciendo de los mercados al poco tiempo de salir.


Después de unos años, de alquiler de películas y comprobar que un nuevo método irrumpía con fuerza en la provincia, Antonio, arriesgó y afrontó instalar este nuevo método, por todo el pueblo, comenzando primero por la cercanía de su casa, ya que esta misma, sería el local, desde donde partiría todo el cableado. En un principio este método resultaba ilegal, pues tenía que afrontar ciertos requisitos los cuales hacían imposible, actuar de manera legal. Aunque hubo problemas con las autoridades, para la retirada del vídeo comunitario, una fuerte ofensiva fue usada por los propietarios de dichos vídeos, ya que alegaban que el vídeo comunitario, constituía una herramienta informativa, para dar a conocer al pueblo, sus costumbres, donde no faltaba ningún acontecimiento cultural, deportivo y religioso, amen de las noticias del pueblo.


Tras un periodo de prueba corto, Antonio, comprobó, que no había problemas y la señal junto con sonido e imagen, llegaba bien, en las distintas casas que instaló, comenzó la instalación a nivel general, comenzando primero por la casas de su barrio. En un corto espacio de tiempo, el vídeo estaba instalado por todo el pueblo, a excepción de Pueblo Nuevo y Huerta Grande.


Con un rudimentario programa informático, (contemplado desde hoy día, aunque en aquellos años, constituía todo un progreso tecnológico) se anunciaba la programación diaria, que comenzaba a las 14:30 horas y continuaba hasta las 22:00 horas, con la última película. Mención especial hay que hacer para la noche de los viernes, donde una película, ofrecida en la hora “golfa”, de alto contenido erótico, hacía las delicias de los aficionados al genero, avisando de que sus fuertes escenas, no estaban aptas para ser visualizadas por personas con arritmias y problemas cardíacos.


Aunque la mayor aceptación, difusión y aprobación de este nuevo método, por parte de las personas asociadas, recaía sin duda en los innumerables acontecimientos de toda índole, que Antonio, con su “Panasonic 7” recogió en los largos años que estuvo al frente del vídeo, donde su imagen , cámara al hombro, se hizo popular, común y habitual, en todos los acontecimientos y costumbres del pueblo...Pregones de todo tipo, Sandalios, Romerias, Veladas, Hachas y todo aquello que fueran de interés para el pueblo. Aparte, en el ámbito deportivo, fue todo prodigioso y todos los partidos de nuestro glorioso club, fueron recogidos, con su cámara, tanto si nuestro club jugaba en nuestro terreno, como en los campos de la provincia, contando como locutor del prestigio de una persona llamada Francisco González Durán, que puso su voz y talento, para informar del desarrollo de los encuentros, con sus acertados comentarios.


A principios de la década de los noventa, tras largos años al frente del vídeo, Antonio, abandona dicho negocio, traspasando todo, a una nueva persona llamada, Manuel Fernández Bayo. Manuel, continuó en la misma línea, que tanto éxito obtuvo Antonio, recogiendo todos los acontecimientos, en una cámara más avanzada, la “Panasonic 10”. Es aquí, en esta década de los año noventa, cuando el vídeo comunitario, progresa, transformándose, perdiendo su formato original de películas, para integrarse y ofrecer imágenes de un canal de pago, del grupo Prisa, llamado Canal Plus y un nueva plataforma llamada Vía digital, especializada en peliculas de acción, terror y eróticas, con el popular canal 18.


Con toda esta transformación sufrida, el vídeo comunitario continuó con bastante éxito en la década de los noventa y principios del nuevo milenio, hasta desaparecer. Ya solo queda como recuerdos, distribuidas aún por el pueblo, las cajitas de color blanco, que nos acercaba, las imágenes hasta nuestros hogares, para regocijo y alegría de nuestros allegados.



Recuerdos de Tharsis....El vídeo comunitario.


Marcos Tenorio Márquez.


 

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