Vínculo perpetuo.
...Minas de Tharsis, año 2012. Comienzo a escribir este breve relato y aún siento escalofríos, recordando todo lo sucedido hasta este momento, en que me he decidido a escribir, guiada por una sensación extraña, que alojada en mi interior, suplica para que escriba la historia y que la conozca el pueblo.
Algunas personas, me tacharan de loca, demente o perturbada, se equivocan, soy una persona sencilla, discreta, que un día juré ante el altar amor eterno o como titulo a este breve relato ... vínculo perpetuo, con el ser que más he querido en este mundo.
Conocí al hombre de mi vida, en una reunión de amigos, allá por la lejana década de los años ochenta. Me tuve que presentar yo, aunque esté mal aceptar que una chica se presente primero, pues así está reconocido. Lucía larga cabellera, quizás influenciado por la música que escuchaba, que no era otra que..Heavy Metal y en especial una banda llamada...Iron Maiden cuya camiseta que lucía, me producía espasmos, al contemplar un ser horrible, portando un hacha en aptitud desafiante. Aunque a decir verdad, lo que más me impactó fue su extremada timidez, que trataba de disfrazar y disimular, con una imagen de hombre duro.
..-¿Hola, que tal...como te llamas, yo María ?
..-Me presente ante el, con estas sencillas palabras
..-Juan.
..-Respondió con timidez.
..-¡No bailas, es buena música...ah ya sé, eres jevi o como se diga..¿No?
..-Exclamé, lanzando una pregunta.
..-Sí, me gusta esa música.
Respondió de modo tímido, resguardando, ocultando su bello rostro, con la melena, que cubría parte de la cara. Creo que a partir de ese momento, en mi corazón hizo impacto la flecha lanzada por cupido, y me enamoré de aquel muchacho, tímido, apocado y retraído, cuyos gustos musicales eran totalmente opuestos a los míos. Nuestro noviazgo fue normal, como la de otras tantas personas que se quieren y se aman. Los domingos, con la llegada de la primavera, solíamos acudir a un lugar en el pueblo rodeado, de exuberantes pinos piñoneros y eucaliptos. Un lugar mágico y confortable, donde solíamos escuchar música en un radio cassette, y una cinta grabada de grandes éxitos de música rock, era nuestra favorita, pues poco a poco me fue convenciendo de que esa música era celestial. La música discurría por la cinta y ambos prodigábamos nuestro amor, hasta la llegada de un tema titulado Halloweed by the name (Bendito sea tu nombre) entonces, su cuerpo experimentaba un cambio drástico, su vellos erizaban y un escalofrío recorría su fornido cuerpo de metro ochenta. Aquel tema le apasionaba, excitaba y exaltaba, y me transmitía toda su energía, la cual valoraba.
Varios
años de noviazgo, fueron suficientes para contraer matrimonio, en
una sencilla ceremonia, en cuyo altar, juré amor eterno y fidelidad
para siempre. Ya casados, y convivir unos años con los suegros, por
fin pudimos comprar un humilde cuartel, que adaptamos y amueblamos
con ilusión tras una amplia reforma.
Pocos años después de matrimonio, vino al mundo, nuestra querida hija que reforzó aún más nuestros lazos de amor, cariño y afecto. Nuestro matrimonio era todo un ejemplo de convivencia, entendimiento y relación y jamás hubo discusiones y peleas.
Mes de Marzo de 2007
..-¡Cariño, voy a dar una vuelta con la bicicleta!
..-Ten cuidado, no tardes mucho, tenemos que ir esta tarde a tomar café con mis padres.
..-Descuida, pronto estaré aquí.
Transcurrida una hora, unos golpes en la puerta...
..-¡Vaya, que rápido has regresado!.
..-Exclamé.
..-María, algo ha pasado.
Estas palabras, pronunciadas por mi vecina Josefa, retumbaron en mis tímpanos y un extraño presentimiento, se apoderó de mi alma. Perdida la noción del tiempo y con un ataque de histeria, me fue dada la noticia, que jamás en mi vida quería escuchar.
..-María, tu esposo Juan, ha aparecido sin vida, supuestamente, tras una caída de bicicleta.
..-¡Donde!
..-Exclamé, con una dudosa sensación, de tranquilidad, que se alteró al conocer el lugar.
..-En los pilones de agua que se encuentran, detrás del malacate.
Entonces irrumpí a llorar, gritar, e hizo falta medicación para calmar mi estado. Ya más calmada, nuevamente irrumpí en llanto.
..-Nuestro lugar favorito, al que acudíamos a escuchar nuestra música, donde prodigábamos nuestro amor...porqueeee.... señor.... porqueeeee, me haces esto...Juannnnnnnnnnnnn, amor míooooo.
Deprimida, sin ganas de vivir, transcurrieron los días. Tan solo mi hija, constituía mi único apoyo para seguir adelante. El lugar donde mi querido esposo tuvo el accidente mortal, quedó para siempre olvidado, aunque pasados unos meses, comencé a tener visiones del lugar, donde aparecíamos ambos, radiante de felicidad. Una fuerte tentación y curiosidad, hizo que una de las tardes visitara la zona, aunque no sabía el lugar justo, la cinta que instalaron alrededor del cadáver, me daría el lugar exacto. En breves momentos llegué al lugar y pude ver aún restos de la cinta, que instalaron las autoridades. Irrumpí de nuevo en llantos, a escasos metros del accidente, solíamos escuchar nuestra música favorita. De pronto un escalofrío recorrió mi cuerpo, aunque la temperatura era elevada, mis vellos erizaron y notaba como una presencia, cerca de mí. No puedo explicar dicha sensación, aunque me transmitía relajación, alivio y desahogo. Desde ese mismo día comencé a frecuentar el lugar, pues me producía sensaciones, donde reinaba la tranquilidad que necesitaba para vencer la ansiedad, que produjo su temprano fallecimiento.
Cumplido el primer aniversario de su fallecimiento, mis visitas se prolongaban más allá de la medianoche. Iluminada con el sutil halo de luz, que brotaba de una vela, en el radio cassette, volvía a poner de nuevo la cinta, que tanto escuchábamos juntos, y una de las noches presencié como una extraña ave se posaba en las ramas de un gran pino y me observaba. Un ave parecida al gran búho real, un ave precisamente favorita de mi querido esposo. La cassette discurría sobre los rodillos del radio cassette, en la fría noche del mes de marzo, hasta llegar al tema que tanto anhelaba mi querido Juan....(Bendito sea tu nombre), entonces observe al ave inquieta, moverse de un lugar a otro, como si quisiera comunicarme algo, entonces comprendí, mientras mi vellos erizaban.
..-¡No puede ser, este tema era el favorito de mi querido Juan...!
Exclamé, extrañada.
No soy persona que crea en la reencarnación de las almas y en ninguna otras cuestiones religiosas, pero este suceso me hizo meditar y reflexionar.
..-Y si existe un vínculo desde el más allá, a través de seres vivos, los cuales quieran transmitirnos algún mensaje.
Acabado el tema y la cinta, llego al final, el ave marchó sin que yo me diera cuenta, de modo silencioso. Todos estos años atrás me he acercado hasta el lugar del triste siniestro y siempre se ha repetido la misma historia, siento la necesidad de comunicarme, para que el alma de mi querido esposo descanse en paz. Pasados cinco años del suceso creo que va siendo hora de llegar a una conclusión, quiero descifrar, el mensaje, no puedo estar más tiempo sin conocer que desea comunicarme. La tabla de ouija, me produce respeto y miedo, así es que confecciono una tabla en mi hogar, donde aparecen solo letras, que me indicaran que es lo que realmente desea transmitirme. Los primeros intentos de comunicación, resultan nulos, no consigo conectar y estoy a punto de abandonar, cuando en un último intento observo como el vaso, que aparece sobre la tabla se mueve.
..-¡Cariño, amor mío...eres tu!.
Entonces un escalofrío, recorre mi cuerpo, el vaso sin que yo lo fuerce, comienza a moverse hacia la frase de dos letras.
..-Sí
..-Cariño te echo mucho de menos, no pasa un día sin que recuerde tu presencia, nuestra hija ya es una mujercita, crees que debo hacer algún cambio en mi vida.
De nuevo el vaso, se acerca nuevamente, hacia las letras.
..-Sí
..-Crees que debería encontrar un nuevo hombre, honesto, humilde y buena persona, como fuiste tu.
..-Sí
Entonces comprendí todo, mi querido esposo, desde el más allá, quería verme feliz y no sufrir apesadumbrada, afligida y amargada, quería que el resto de mi vida disfrutara, como lo había echo junto a el.
..-¿Pero como conseguir un hombre hoy día, en que prima más el interés, que la persona en cuestión?.
Esa es la pregunta que me hago y para iniciar una nueva vida comencé a poner la casa en venta, pues no quiero vivir con otra persona, en la casa en la que un día, tanto disfrutamos los dos, cargada de recuerdos, añoranzas y nostalgia.
Junto con mi hija alquilamos una casa en el pueblo, que está en venta y ojalá podamos comprarla.
..-¡Quizás algún día encuentre mi nuevo amor, mientras tanto, disfruto con mi hija!.
Regresé de nuevo a aquel lugar mágico, donde un día mi querido esposo encontró la muerte, pero ya no sentía nada, el mensaje que quería dar fue captado y desde entonces descansa feliz.
Vínculo perpetuo
Un relato de Marcos Tenorio Márquez.
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