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viernes, 30 de julio de 2021

Clasificado "S".....El seductor

Clasificado “S”....El seductor.




Carlos, conocido como Charly, limpia de modo meticuloso y minucioso, su moto de 49 cc “puch condor” aunque trucada con un carburador de 74 cc. Charly, pertenece a un grupo de moteros, amantes de estas pequeñas motos, de poca cilindrada.

Su aspecto, recuerda, a un ángel del infierno (mítica banda de moteros americanos..Hells Angels)por su larga cabellera, su amplio mostacho y los ojos azules como el cielo, que esconde, tras unas gafas tipo aviador. Charly, es el líder, de una pequeña banda, que recorre los pueblos limítrofes, para intentar ligar con jóvenes en las discotecas, que comienzan, a estar de moda a finales de la década de los setenta.

Antes de partir para los distintos pueblos, la banda se reúne, en un bar cercano. Allí ponen a punto las motos y emprenden rumbo, antes que el crepúsculo comience a cubrir de sombras el pueblo.


Siempre, ataviado, con ropa tejana, destaca su chaqueta y pantalón, de pernil de pata elefante, por el cual sobresalen, unas botas de color marrón claro, con un gran tacón, que eleva, ya de por sí su longeva estatura, más de metro ochenta, de hombre fornido, corpulento y robusto, al cual, las jóvenes de los distintos pueblos, han bautizado con el sobrenombre de ”El seductor”.



Llegado al pueblo, comienza su verdadera pasión, seducir jovencitas, que aún no están “desvirgadas” (enuncio esta frase en un lenguaje barriobajero y macarra) por algún joven de la localidad. El grupo de jóvenes, después de acicalarse el pelo, con los peines tipo carey que se ajustan al bolsillo trasero del pantalón, emprenden la caza en la discoteca, pub o bar de copas, de la localidad.

Separado del grupo de amigos, Charly, comienza con su estrategia seductora; amplia sonrisa, cabello recién lavado con champú “sunsilk”, dientes blanco como la nieve, después de una sesión en casa, de una hora, y sobre todo parla. Tras pedir la copa, otea el horizonte, como un búho sobre una roca. Este sentido, para descubrir jovencitas predispuestas, lo hace diferente que a los demás. Con movimientos sutiles, sin despertar la atención, pronto esta colocado al lado de la joven, ”bailoteando” sin tener idea de música,(pues esta no le interesa)comienza su táctica con diálogos, en los que la joven rendida a sus encantos, cae atrapada como una mosca en una tela de araña.


...- ¿Te apetece tomar algo?.


Típica pregunta, de ligón de discoteca, totalmente desfasada en esta época, pero que en aquellos años, obtenía buenos resultados, según que sujeto la interrogara.


...-Una fanta de naranja por favor.


Responde, la joven, totalmente cautivada.



...-De acuerdo, yo tomaré una copita de whisky.


Asevera, Charly, con una amplia sonrisa.



Con esta primera fase de la estrategia, se cumple casi un cincuenta por ciento, de la conquista.



..-.¡La nena está casi en el bote, falta aún la parte más delicada!.


Exclama en sus pensamientos.


...-¿Mira, la pista está muy abarrotada, porqué no nos sentamos, en aquellos asientos del rincón?.


Pregunta, empleando todo su arte.



...-De acuerdo.


Responde la joven, totalmente entregada.


...-¿A propósito, como te llamas, pues aún no sé tu nombre?.


Pregunta, con una sonrisa pícara.


...-Patricia, me llamo Patricia, aunque en el pueblo, todo el mundo me conoce como Patri.


...-Yo me llamo Carlos, y en el pueblo todo el mundo, me conoce como Charly.



Ya presentados, y ocultos de miradas indiscretas, comienza la etapa final.


...-Ufff, que calor hace aquí, con tanta gente, la temperatura asciende de modo elevado...¿Te apetece dar una vuelta, ahí tengo mi moto?.



Pregunta, con claros deseos conquistadores.



...-Si, yo también tengo calor, está esto tan cerrado.


Responde, la joven.


Al salir de la discoteca, sus amigos, que aún no se habían comido una rosca, dialogan entre ellos.


...-¡Ahí va Charly, con una pedazo de hembra, vaya suerte tiene!.


Exclama Pedro, el más joven del grupo.



...-¡Suerte no, lo que hay que saber es ligar y Charly...sabe !.


Exclama Victoriano.


...-¡Es verdad, lo que dice Victoriano, por eso lo conocen en los pueblos como, el seductor!.


Exclama, el mayor del grupo, Oscar.


Ajeno al dialogo de sus amigos, Charly y Patricia, emprenden un corto viaje, a un lugar cercano. Durante el camino, los tersos senos de Patri, se ajustan a la espalda de Charly, ascendiendo la temperatura de la entrepierna, de manera brusca. Ya en el lugar elegido, solo con la mirada, ya saben ambos, que buscan. Y es en esta última fase de la conquista, dónde Charly, destaca del resto.


Comenzando con los típicos besos, sus manos fuertes y amplias, comienzan a palpar los senos de Patri, de una forma delicada, sutil y suave.

Patri, totalmente colapsada, se entrega en cuerpo y alma, complacida, por la sutilidad de los movimientos de Charly, que baja una de sus manos hasta el bajo vientre, para liberar, la hebilla del cinturón.


Patri, mientras, lanza tímidos gemidos de placer, en un frenesí salvaje, que la dota de una fuerza sobrehumana, para hundir las uñas en las espaldas de Charly, el cual tras retirar el tejano, comienza con sutileza y extremada delicadeza, deslizar la mano por la suave piel de la extremidad inferior , rozando levemente, la lencería intima de fina seda, que comienza a humedecer, lubrificando de esta forma, la parte más deseada por Charly.


Sumidos en una vorágine de placer, deleite y satisfacción, Charly, conoce perfectamente su cometido, hacer feliz a la mujer y no buscar solo su satisfacción personal. Momentos antes de alcanzar el clímax, Charly, retira con precisión su atributo del interior de Patri, para depositar el semen, a poca distancia, de una complacida Patri.


Consumado el acto, los rostros de ambos, reflejan la sensación de placer vividos. Aupados nuevamente en la motocicleta, Patri, sugiere, que su caballero vuelva otro día, para rememorar este pasado instante. Sin duda, se ha enamorado y quiere que este extraordinario ser, forme parte de su vida para siempre. Los pensamientos de Charly, son otros, solo busca a la mujer para satisfacción mutua. Ante todo, es un caballero y rehúsa del engaño y falsas promesas, para seducir a una mujer.


Con la discoteca cerrada, los amigos esperan a Charly, que aparece al momento, esbozando una sonrisa.


...-¿Que tal, cómo habéis escapado?


Pregunta, a sus amigos.


...-¡Fatal, nada, como siempre, no nos comemos una rosca!.


Exclaman al unísono.


...-Ahora, tu si que has ligado...¡Vaya hembra, que morenaza!...¡Cuantos le has echado!.


Exclaman los amigos, empleando un lenguaje chabacano, grosero y gamberro.


Ya en casa, a punto de amanecer, Charly, comienza a retirar la ropa, después de guardar la moto sin armar ruido. Sobre su cinturón de cuero, tiene anotados, los nombres de la jovencitas, con las que ha logrado mantener relaciones. El último nombre en anotar, en el poco margen que queda, será el de Patricia.

Un nuevo fin de semana, aguarda para el grupo de moteros, y nuevo destino, para no repetir en el mismo lugar. Por fin en la discoteca, tras un duro viaje, pues esta ruta contaba con el doble de kilómetros que la anterior, llegan los amigos.


Nuevamente, repiten con la ceremonia y rito al cuerpo, acicalando con los peines. los cabellos rebeldes. Charly, esta vez, cambia de planes, ofreciéndose ayudar a sus amigos a ligar, pero estos, planean un astuto plan...Una apuesta.


...-¿Cual será dicha apuesta?.


Muy sencilla. A la discoteca, en cuestión, acude una joven tímida y frígida. Los jóvenes del lugar comentan que es imposible ligar con ella, pues todo el que ha tratado ligar, se ha llevado calabazas. Y estos proponen a Charly, este desafío y reto, exclamando.


...-¡Charly, te proponemos una apuesta!.


Exclama Victoriano.


...-¿Cual!.


...-Si eres capaz de ligar, con aquella rubia, que baila de forma tímida en aquel rincón, te damos 1000 pesetas, si no eres capaz, nos tendrás que dar 200 pesetas a cada uno...¿Aceptas?.


Tras un corto espacio de tiempo.


...-¡Claro, que acepto!.


Exclama, mientras choca la mano de los cinco amigos.


...-Vaya, el día que me encuentro con más dudas, incertidumbre y decisión, estos tíos, me plantean un reto.


Asevera, mientras degusta su tercera copa de whisky.


...-Vaya, aún no me encuentro bien, seguiré tomando unas copitas, el reto será hasta el cierre del local.


Asevera, nuevamente, volviendo a beber.


Ya con varias copas de más, se dirige hacia la pista, donde baila la joven de cabellos rubios, con aire tímido, apocado y retraído. Charly, por su parte, con unas copas de más, se lanza en picado, “bailoteando” como suele hacer, a escasos metros, y actuando de manera diferente, pues el alcohol ingerido, potencia aún más, el dominio de seducción.


...-¿Hola, como te llamas, que bien bailas?.


Lanza, todas estas preguntas, seguidas, para ver la reacción de la joven.


...-Olga, me llamo, Olga.


Responde, la joven con timidez.


Acto seguido, comienza con toda su maquinaria, seductora, cautivadora, para tratar de convencer y seducir a la joven.


...-¿Te apetece tomar algo, Olga?


Pregunta, totalmente convencido.


...-Si, una coca cola, por favor.


Responde, Olga.


...-Vaya, que fácil, de momento todo, la tengo en el bote...vaya mil pesetas, que me voy a ganar de esos pardillos..jajajajajaja.


Mientras tanto, sus amigos, en un rincón de la discoteca, no apartan la vista, de la pareja.


Con todo el protocolo de seducción seguido, unas copas de alcohol de más, hace que sus facultades, de concentración, meditación y reflexión, comiencen a menguar.


...-Vaya, que feliz me encuentro, porque no vamos a dar una vuelta, cariño.


Asevera, Charly, con una sonrisa, que denota el exceso de alcohol.


...-Vale, si tu quieres.


Responde Olga, totalmente convencida, de poseer a su lado un “hombretón” de cerca de dos metros.


...-Vale, pero vayamos cerca, pues no estoy capaz de coger la moto.


Asevera, Charly.


Pronto, los amigos, que se percatan de la situación, siguen a Charly y su acompañante, hasta un lugar cercano, escondiéndose tras unas paredes.


...-Desde aquí, poseemos buena visión.


Asevera, Victoriano.


Ya en el lugar, Charly, comienza con los mismos actos protocolarios, que emplea para las demás jóvenes, comenzando por besar los labios y continuar por los senos, empleando sutileza y suavidad, hasta llegar a la zona más intima, donde tras desalojar la cremallera, descubre que la tal Olga, posee un miembro mayor que el suyo.


-Ahhhhhhhhhh, pero esto que es, cabronesssssss, me habéis querido engañar, ahhhhhhhh.


Grita y vocifera, Charly, que abandona el lugar, poseído por una extraña fuerza, batiendo todos los records de velocidad, hasta llegar hasta la motocicleta.


Los amigos, que han seguido toda la escena, no pueden contener más las carcajadas y risotadas, explayándose y recreándose, de la secuencia, presenciada, y que ha tenido al fanfarrón y chulo de su amigo, como principal protagonista.


Al día siguiente, Charly, se muestra esquivo, avergonzado, desconfiado, al ver los rostros de los amigos.


...-¿Sabrán, ellos la verdad?


Se pregunta, mientras quiere pasar desapercibido, pero aún queda una apuesta...


...-¿Quién la ganó?.


Por decisión de todos, la apuesta quedó declarada nula, y de esta anécdota, no se volvió a hablar jamás, aunque pasado mas de cincuenta años, en los rostros de Victoriano, Leonardo, Manuel, Francisco y Pedro, aún quedan sonrisas, cuando todos se reúnen con....”El seductor”



Clasificado “S”....El seductor.


Un relato de Marcos Tenorio Márquez.


 


 

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